Desde que la imagen de santa María Magdalena fuera donada en el siglo XVI a la entonces colegiata de La Redonda, varios han sido los lugares en los que ha estado ubicada.
El primero que conozcamos, teniendo testimonio fotográfico de él, fue sin ninguna duda un lugar privilegiado junto al altar mayor de la concatedral. Como se puede apreciar en esta fotografía de comienzos del siglo XX, la imagen estaba situada en la columna izquierda próxima al retablo mayor. Actualmente si nos aproximamos a esta columna y alzamos la vista a unos 2-3 metros del suelo aún podemos ver la “cicatriz” del pedestal que sujetaba a María Magdalena.
A mediados del siglo XX, la imagen se trasladó a un lugar más escondido junto a la Sacristía. Concretamente entre el Mausoleo del General Espartero y la imagen de la Asunción. Ahí, también existe “cicatriz” de su paso.
Allí estuvo hasta que a principios del siglo XXI se realizaran las obras de rehabilitación de la concatedral y cambiara su emplazamiento actual: a mano derecha del cuadro del Calvario de Miguel Ángel Buonarroti.
Desde el mes de junio y debido a las obras que se están realizando en la cúpula que hay sobre el Mausoleo de General Espartero y la entrada de la Sacristía, (debido al accidente sucedido en septiembre de 2019), María Magdalena se encuentra en una de las capillas de la nave central. El día de su traslado provisional, muchos de los allí presentes pedían un cambio de ubicación para que pudiera ser contemplada y visitada con mayor facilidad esta magnífica talla. ¿Será posible el cambio?
