viernes, 23 de febrero de 2024

75º Aniversario - Trajes (IV)

Desde que en abril de 1949 María Magdalena saliera por primera vez en la Magna Procesión del Santo Entierro, tres han sido los hábitos vestidos por sus portadores y acompañantes. Recordémoslos.


1º Traje (1949 -1979)




El propio de la antigua Hermandad. Compuesto por túnica y guantes blancos, zapatos negros, cíngulo de esparto y capuz morado con capirote alto y el escudo de la Hermandad en el pecho. Con el paso de los años se decide que los acompañantes y portadores del paso cambien el capuz alto por uno bajo de tipo verdugo.





2º Traje (1980- 1992)




Con la fundación de la cofradía se diseña un nuevo hábito de túnica marrón clara, zapato negro, guantes beige, capuz sin capirote y cíngulo en color marrón oscuro. El escudo de la Hermandad en el capuz y el de la cofradía en el brazo derecho de la túnica. Los colores elegidos van en consonancia con el color de la estera que lleva la imagen. Se estrena por primera vez el 4 abril de 1980, Viernes Santo. 

Como curiosidad, comentar que al ser parecido el uniforme de la Policía Nacional de los años 80 con el de la cofradía , miembros del cuerpo estuvieron escoltado nuestro paso durante algunos años por iniciativa del Hermano Mayor Ángel Castillo.



3º Traje (Desde 1993 a la actualidad)




En 1991 la Junta de Directiva empezó a tener problemas para seguir confeccionando trajes, ya que la tela de tintada marrón se acababa. Se buscó pero no se llegó a encontrar algo parecido. Con la próxima creación de la Banda de Tambores y Bombos, la necesidad de nuevos trajes aumentó y por ello se decidió su cambio. El elegido sería de túnica y capuz sin capirote en color gris claro con el emblema de la Hermandad, capa negra con el escudo de la cofradía a la altura del hombro derecho, corona trenzada, cíngulo, zapatos y guantes en color negro. Los dos primeros años los cofrades portadores no llevaron capa.





La elección del nuevo hábito no fue fácil ya que hubo otras dos propuestas además del escogido. El primero de ellos era de túnica azul y capuz bajo del mismo color, cíngulo y guantes negros. Y el segundo, túnica gris, capuz bajo morado, cíngulo y guantes negros. En octubre de 1992 en Asamblea General Extraordinaria los cofrades votan por gran mayoría el hábito actual. Su estreno: el 2 de abril de 1993, Viernes de Dolores.


En 1998 el capuz pasa a ser de capirote alto y al año siguiente se sustituye en el capuz el emblema de la Hermandad por el de la cofradía.





lunes, 19 de febrero de 2024

Vía Crucis y Exaltación


El pasado fin de semana fue intenso. El viernes 16, en la Concatedral de la Redonda se celebró el primer Vía Crucis de la Cuaresma siendo nuestra cofradía la encargada del mismo. 




Fotografía por gentileza de Jaime Jibiry

Fotografía por gentileza de Jaime Jibiry

Fotografía por gentileza de Jaime Jibiry




Asimismo, el sábado 17, se celebró la Primera Exaltación de tambores y bombos de Oyón (Álava), cuya organización también corrió a cargo de nuestra cofradía. 

En la plaza de Los Fueros, se pudieron escuchar las distintas marchas interpretadas por los componentes de las bandas de la Entrada de Jesús en Jerusalén (Logroño y Murillo de Río Leza), Nuestra Señora la Virgen de la Soledad (Logroño), Bendito Cristo de las Misericordias (Ribafrecha) y la de María Magdalena.

Un evento que fue preludio a un calendario con diversas citas para la Sección de Tambores y Bombos previo a la Semana Santa.


Sección de Tambores y Bombos - 2024





miércoles, 14 de febrero de 2024

Cuaresma 2024



Cuaresma, tiempo destinado a la conversión y conciliación con Dios. Momento para detenernos y dejar a un lado todo aquello que nos distancia y priva de lo importante. Tiempo de reflexión para fortalecer nuestra fe y que nos prepara para la Pascua. Para el mundo cofrade, etapa necesaria y preludio a la Semana Santa. 










Con su llegada, la Hermandad de Cofradías de la Pasión y las cofradías que la integran presentaron los actos a celebrar durante estos días. También se presentó el cartel anunciador de nuestra Semana Mayor. Este año ha sido diseñado por el logroñés Marcos Sánchez Martín. Él lo define así:


"Un cartel que rompe con el estilo tradicional y a la vez arriesgado. En Semana Santa estamos acostumbrados a ver imágenes fotográficas de pasos y cofrades y, éste juega con las simetrías que forman los capirotes en una composición abstracta y moderna. 

Refleja once capirotes que representan los once colores de las distintas cofradías de la ciudad y uno de color granate que identifica a la ciudad de Logroño.

Recuerda incluso a un cuadro cubista en el que se integran los colores de las cofradías destacando sobre un fondo oscuro para mantener el misterio de la Semana Santa con una tipografía que se integra muy bien con formas picudas y triangulares".


Personalmente no me gusta y comparto definición con su creador: rompedor y arriesgado. Si lo que se buscaba era acabar con la línea tradicional, generando crítica y debate: objetivo cumplido.




viernes, 9 de febrero de 2024

75º Aniversario - Y 52 años después, el Silencio llegó (III)

Después de integrar la imagen de María Magdalena Penitente en la Semana Santa de nuestra ciudad en 1949, la creación de la Procesión del Silencio en la que María Magdalena es la auténtica protagonista, es sin duda uno de los grandes logros por parte de nuestra cofradía en estos 75 años.






Desde 2001 cada primavera esta procesión emociona más, el silencio y seriedad de cofrades y público es sobrecogedor, ayudando a entender mejor el sentido real de la Semana Santa. Es uno de los momentos sencillos, únicos e inigualables de nuestra Semana Mayor, transmitiendo una sensación de paz, reflexión y meditación interna que no se encuentra en otras procesiones de nuestra ciudad. Recordemos sus inicios. 


En el seno de la Junta Directiva y a iniciativa de Rubén Pérez Lázaro y Juan Ramón Jiménez Arechavaleta, se estudia la posibilidad de organizar una procesión propia. Ambos cofrades exponen la necesidad de crear una procesión distinta a las conocidas en Logroño. Basaban su idea en varios puntos de gran importancia:


1º- La procesión sería de carácter penitencial, acorde a los fines e identidad de la cofradía. Teniendo como nombre: Procesión del Silencio y Dolor de santa María Magdalena.


2º- Se haría en completo silencio. Posibilitando a la Sección de tambores y bombos portar el “paso”, asegurando así el relevo generacional de los portadores.


3º- Como símbolo de fraternidad y hermandad con el resto de cofradías, los acompañantes de éstas, mayores de dieciocho años podrían también cargar siempre y cuando lo pidiesen antes del inicio de la procesión.


4º- Hora de comienzo: doce de la noche del Viernes Santo. El punto de partida sería la Concatedral de La Redonda recorriendo: Plaza del Mercado, Portales, Marqués de Vallejo, Hermanos Moroy, Capitán Gallarza, San Agustín, Plaza de San Agustín, Portales, Plaza del Mercado y  acabando de nuevo en la Concatedral.





La idea fue muy bien acogida, siendo aprobada por la Junta Directiva del entonces Hermano Mayor Isaac Castillo. En Asamblea General Extraordinaria el resto de cofrades aprueban por unanimidad la nueva procesión.


El Hermano Mayor y los dos cofrades impulsores, gestionan su autorización con el Cabildo de la Concatedral y la Hermandad de Cofradías de la Pasión de la ciudad de Logroño. Ambas partes apoyan la Procesión del Silencio y Dolor de María Magdalena, ratificando su organización y afirmando que daría mayor realce y sentido a nuestra Semana Santa. Tras duros y largos meses de trabajo se alcanza la meta deseada.                  



El 12 de abril de 2001 pasa a la historia de la cofradía, como el día en que se celebra la primera Procesión del Silencio y Dolor de María Magdalena. El resto de Cofradías de la ciudad se vuelcan en el desfile acudiendo en masa como acompañantes. El silencio tan sólo es roto por el sonido de las horquillas, el golpeo del mazo y el arrastre de la enorme y pesada cruz que cargan los cofrades del Santo Sepulcro. La ciudad se agolpa en completo silencio durante todo el recorrido dando muestra de gran respeto y fervor.




Desde la Semana Santa de 2005 tiene lugar un momento único. La cofradía del Descendimiento de Cristo de regreso con su paso a la Iglesia Imperial de Palacio coincide con la salida de María Magdalena y sus penitentes. Un encuentro de gran seriedad y silencio, interrumpido por el rezo de las cofradías y asistentes.